Los constantes avances en la tecnología y el rápido acceso a la información han dado un giro a los modelos de negocios. En los últimos años las mejoras en la interacción entre los equipos de trabajo por la inmediatez en la comunicación, aceleró el ritmo de las organizaciones. Por lo tanto, se ha generado un cambio en la planificación de sus estrategias, invirtiendo no solo en tecnología sino también en el capital humano para adaptarse a las necesidades del mercado actual.
Esa interacción cambió el sentido de las estructuras organizacionales. Estas dejaron de ser jerárquicas y dieron paso a la conformación de equipos de trabajo multidisciplinarios, con diferentes roles, que aportan sus habilidades, capacidades y competencias. Como resultado, es preciso que los líderes utilicen diferentes estrategias para atraer, desarrollar y conservar el talento que aporta valor y genera resultados.
Es ahí donde juegan un papel fundamental los avances tecnológicos con sus diversas plataformas y medios que dan paso a la transformación digital. De la mano de esta transformación hay un sin número de competencias y habilidades que se requieren en el personal y alternativas que facilitan nuevas estructuras con flexibilidad de horarios y procesos.
Existen empresas que brindan soluciones integrales en las que se pueden externalizar o tercerizar tareas operativas y repetitivas, liberando tiempo que puede que ser invertido en:
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La razón de ser del negocio
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Crear estrategias que estén alineadas con las metas y objetivos
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Conformar y dirigir equipos de trabajo que estén comprometidos y motivados.
Para lograr ese compromiso y motivación en el personal, es esencial promover una cultura de innovación, aprendizaje y mejora continua. Lo antes descrito es la base para forjar una marca como empleador y mejorar la experiencia del colaborador dentro de la organización. Esto seguramente hará que tu empresa se convierta a su vez, en marco de referencia aspiracional para futuros trabajadores y clientes, dando como resultado la fórmula perfecta “ganar – ganar”.
En el escrito anterior comentaba sobre la importancia de revisar y evaluar el alcance de todos los procesos y sus actores para identificar las tareas que se le alejan de las funciones y objetivos para los que fueron creados. Todos aquellos procesos que no están directamente vinculados con la generación de ingresos, como lo son las tareas rutinarias y operativas pueden ser tercerizados.
Por ultimo, les aseguro esta tercerización aliviará las cargas de trabajo, para que el personal clave se enfoque en las funciones y estrategias que generan valor, manteniendo la motivación y el compromiso que nos permitirá llegar a ese “ganar-ganar”
Luis A. Quinzada
Gerente General, Outsourcing