Toda empresa aspira incrementar su valor, no importa en qué etapa se encuentra. Para lograrlo, especialmente cuando la empresa es madura, se necesitan conocimientos y habilidades de liderazgo que permitan incrementar el retorno a la inversión mensual en planilla.
El capital humano sin lugar a dudas es el que mueve el engranaje de la empresa; si el mismo no está alineado correctamente -planifica pero no ejecuta o ejecuta sin planificar- las probabilidades de que se esté perdiendo dinero o dejando de crear valor son altas.
Durante los ciclos económicos de bonanza, no se nota tanto el índice de retorno en la inversión de la planilla, pues el impulso de la economía trae negocio por inercia. Sin embargo, cuando la economía se contrae, es cuando más necesitamos maximizar la inversión que hacemos en los salarios de la gente que trabaja en la empresa. ¿Cómo lograrlo?
Bajo el concepto de “Corporativización” podemos utilizar una fórmula sencilla, pero que su aplicación requiere liderazgo, disciplina, perseverancia y conocimiento:
Maximización de los Recursos: VDP + E = Ei + T
V (Visión) D (Dirección) P (Planificación) + E(Ejecución) = Ei(Estrategia) +T (Táctica)
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El rol de la Junta Directiva en los procesos de “Corporativización” es aportar Visión y Dirección a la empresa. Sin esto, no se tiene el norte o la meta a alcanzar. Luego de establecido ese lugar dónde se quiere llegar, se necesita planificar cómo llegar allí -antes de salir en auto, bote o avión hay que ver cuál es la manera más eficiente de llegar dónde queremos. Esa planificación es el aporte del CEO y su equipo.
El Rol del CEO y su Equipo de Alta Gerencia, aportan valor a la empresa a través de la planificación de la estrategia que hará realidad la visión de la Junta Directiva. El CEO y su Alta Gerencia son los responsables de investigar, estudiar, analizar, crear un ecosistema de innovación, desarrollar planes, evaluar proyectos, definir prioridades e inversiones, determinar la oferta valor, implementar métricas e indicadores para generar un tablero de control con el que se pueda monitorear de cerca el desempeño de la empresa, entre otros, y delegar correctamente en la Gerencia Media la ejecución de las tareas tácticas.
Sin embargo, con frecuencia encontramos que el día a día y el “multitasking” impiden a la Alta Gerencia ejercer su rol principal de planificación. Esto da como resultado un bajo retorno en la inversión en la compensación de la Alta Gerencia, pues se dejan de hacer tareas claves para la sostenibilidad del negocio. Para aclarar aún más: con frecuencia, la Alta Gerencia ejecuta lo que debería hacer la Gerencia Media, y las funciones estratégicas no se ejercen a cabalidad –se ejecuta pero no se planifica.[vc_separator color=»custom» border_width=»2″ accent_color=»#000000″][vc_row_inner][vc_column_inner][vc_text_separator title=»ROL DE LOS MIEMBROES DEL EQUIPO DE LA ALTA GERENCIA:»][vc_column_text][vc_single_image image=»3692″ img_size=»large» alignment=»center»][/vc_column_inner][/vc_row_inner][vc_column_text]
Dependiendo del tamaño y tipo de negocio, se necesitarán más posiciones en el equipo de Alta Gerencia. Lo importante es reconocer en qué momento el negocio cambia y si se está cumpliendo con el rol de planificar en la Alta Gerencia para maximizar el retorno del negocio.
