Según Daniel Goleman: “desde los puestos de trabajo más modestos hasta los altos cargos directivos, el factor determinante no es ni el cociente intelectual, ni los diplomas universitarios, ni la pericia técnica: es la inteligencia emocional.”
Autoconciencia, autoestima, autocontrol, empatía, dedicación, integridad, habilidad para comunicar, pericia para iniciar y aceptar cambios: Goleman demuestra que éstas son las competencias más relevantes en el ámbito laboral.
En nuestra experiencia, tanto en el manejo de vacantes como en la búsqueda de perfiles que cumplan con las competencias requeridas podemos mencionar y destacar que cada vez es más frecuente encontrar dos o más de esas competencias en los requerimientos de una vacante.
La inteligencia emocional, tanto a nivel individual como colectivo, se revela como el ingrediente fundamental de la competitividad. Afortunadamente, en la actualidad se ha comprobado mediante distintos estudios en conducta humana y neurociencia que todos tenemos el potencial de mejorar nuestra inteligencia emocional en cualquier momento de nuestra carrera.
¿Cómo podemos moldear y mejorar nuestra inteligencia emocional?
Existen 4 pasos para moldear y mejorar la inteligencia emocional
- Presta atención a tus emociones: mira bien dentro de ti, como reaccionas ante cada emoción y cómo lo perciben los demás, cómo te relacionas en tu entorno cuando estas: triste, enojado, feliz, desanimado, etc.
- Aprende a manejar tus emociones: una vez hayas evaluado todo lo anterior, entonces es momento de actuar ante ellas, hacer mejoras en las reacciones y las relaciones.
- Expresa cómo te sientes: tener inteligencia emocional no implica ocultar tus sentimientos y emociones, es más que todo expresarlas de manera consciente, reconocer con frecuencia el modo en que te afecta físicamente, y expresarlas sin dejar por ello de ser socialmente correcto.
- Asume responsabilidad por tus actos:
- Cerciórese de todo lo que hace. Mida las consecuencias de sus actos.
- Mida sus palabras y cumpla lo que promete.
- Propicie un ambiente de responsabilidad, corrija a quien no cumpla adecuadamente sus deberes e invítelo a intentar a hacerlo.
- No le tema a lo desconocido. Asuma retos y mida sus capacidades.
- Evalúe cada decisión que tome, por más irrelevante que parezca.
En Siuma Talent contamos con las herramientas especificas para medir la Inteligencia Emocional de sus candidatos y/o Colaboradores, apoyándoles en el proceso de selección y análisis de competencias de colaboradores actuales, contáctanos para conocer más sobre nuestros servicios.
